La mayoría de las personas mira un modelo de autoempleo como quien ve un coche brillante en una vitrina: fascinados por la carrocería, sin abrir el cofre. Aquí vamos a hacer lo contrario: abrir, desarmar y ver dónde están las piezas clave… y las grietas.
El paciente de hoy: Concierge de devoluciones
Un servicio donde te encargas de todo el proceso de devolución de compras por internet para clientes o empresas pequeñas. Desde generar la guía hasta empacar y llevarlo al transportista.
🧠 El cerebro (la propuesta de valor)
Quitarle a alguien un problema que detesta hacer, a cambio de dinero. Simple y directo. El “dolor” es claro: devoluciones tediosas.
💪 El músculo (la operación)
- Recepción de artículos
- Verificación de estado
- Generación de etiquetas/guías
- Envío y confirmación
🩸 El sistema circulatorio (flujo de ingresos)
Cobro por unidad gestionada, o planes mensuales para clientes frecuentes. Márgenes bajos por transacción, pero escalables con volumen.
⚠️ Los órganos débiles (riesgos)
- Daños o pérdidas: asumir responsabilidad puede comerse tus ganancias.
- Temporadas bajas: en meses sin rebajas, baja la demanda.
- Logística ajena: dependes de transportistas y sus tiempos.
💡 El ADN (lo que lo hace viable)
No es un lujo, es un alivio. El cliente paga porque ahorra tiempo y evita estrés.
Diagnóstico: Modelo viable en entornos urbanos con alta compra online. Funciona mejor como servicio express o especializado en ciertos tipos de productos (ropa, electrónicos, etc.).
Este artículo es informativo. No es asesoría legal, financiera ni promesa de ingresos.