Hay ideas que parecen geniales… hasta que acercas la lupa. No estamos aquí para arruinar la fiesta, sino para evitar que compres humo. Este checklist te ayuda a detectar red flags antes de invertir tiempo, reputación o dinero.
🚩 Señales en el discurso
- Promesas vagas: “genera ingresos pasivos” sin explicar el mecanismo concreto. Palabras que suenan bien pero no significan nada.
- Autoridad prestada: “somos #1 en LATAM” sin fuente; “más de 10,000 clientes” sin pruebas.
- Éxitos anecdóticos: una historia heroica y cero datos agregados. Un caso ≠ patrón.
- Lenguaje de casino: “garantizado”, “asegurado”, “sin riesgo”. Negocios reales siempre tienen riesgos.
🧪 Señales en la evidencia
- Datos sin fuente o con fuentes irrelevantes (“un blog dijo…”). Busca metodología, periodo y muestra.
- Capturas convenientemente borrosas o con cifras incompletas (sin fechas, sin contexto).
- Pruebas imposibles de auditar: “clientes confidenciales” para todo, nunca un ejemplo verificable.
- Testimonios de cartón: nombres genéricos, fotos de stock, cero rastros en la web.
🧮 Señales en los números
- Margen fantasma: te hablan de ventas, no de utilidades. Pregunta costos variables, comisiones y tiempos.
- Métricas de vanidad: impresiones, likes, visitas… sin conexión a resultados operativos.
- Proyecciones lineales: asumen crecimiento infinito sin topes (mercado, logística, tiempo humano).
🧱 Señales en la operación
- Dependencia única: un proveedor, una plataforma, un cliente. Si cae, cae todo.
- Procesos secretos: “no podemos explicar cómo” = no hay manual, solo humo o algo que no pueden sostener.
- Tiempo oculto: “2 horas al día” que en realidad son 6. Pide ejemplos de calendario y tareas.
🧾 Señales legales y de contrato
- Cargos recurrentes opacos: precios “promocionales” que suben drásticamente al segundo mes.
- Cláusulas de silencio agresivas para impedir reseñas honestas o comparativas.
- Lenguaje ambiguo que mezcla “promoción” con “contrato vinculante”. Si no entiendes, no firmes.
🧭 Cómo contrastar sin pelearte con nadie
- Pide el mecanismo en 1 párrafo: qué entra, qué sale, y por qué alguien pagaría.
- Solicita un ejemplo auditable: un caso con fechas, contexto y límites claros.
- Calcula tu propio margen: mete costos reales (envío, comisiones, tiempo).
- Haz una prueba de 7 días: con límites de tiempo y dinero. Si no pasa umbral, pausa.
- Lee el contrato en voz alta: suena absurdo, pero detectas ambigüedades al escucharte.
✅ Señales de que quizá no es humo
- Explican el proceso sin misticismo y aceptan preguntas incómodas.
- Muestran datos con metodología y rango de resultados, no solo “el mejor mes”.
- Aclaran riesgos y límites: qué sí, qué no y cuándo no deberías intentarlo.
- Te dan una lista de tareas y un criterio de salida si no funciona.
Conclusión: El humo vive en lo vago, lo imposible de auditar y lo que suena demasiado perfecto. La prueba real es simple: ¿puedes explicar el modelo en un párrafo, con pasos verificables y márgenes que resistan una hoja de cálculo?
Contenido informativo. No es asesoría legal, financiera ni promesa de ingresos.